Rehabilitación de fauna salvaje en Castilla-La Mancha: cinco aves rapaces regresan a su hábitat tras recuperarse en el CERI de Sevilleja de la Jara
La conservación de la fauna silvestre es una tarea fundamental para preservar la biodiversidad. En Castilla-La Mancha, el trabajo de recuperación de especies protegidas es una labor constante, y el Centro de Estudios de Rapaces Ibéricas (CERI) de Sevilleja de la Jara es un centro de referencia en esta misión. Recientemente, cinco majestuosas aves rapaces han sido liberadas en su hábitat natural tras superar con éxito su proceso de rehabilitación en este centro.
El CERI: un bastión en la protección de aves rapaces
El CERI de Sevilleja de la Jara se ha consolidado como uno de los principales centros especializados en la recuperación de aves rapaces en España. Gracias a su equipo de veterinarios, biólogos y técnicos especializados, cada año ingresan y se rehabilitan decenas de ejemplares heridos o enfermos que luego pueden ser liberados en condiciones óptimas para su supervivencia.
Cinco especies recuperadas y liberadas
Las cinco aves liberadas pertenecen a especies de gran relevancia ecológica y algunas de ellas están catalogadas como vulnerables. Cada una fue hallada con diferentes tipos de lesiones o síntomas derivados de causas antropogénicas, como colisiones con infraestructuras o intoxicaciones. Gracias al tratamiento y cuidados adecuados, estas aves han podido regresar a su entorno natural.
Las especies liberadas en esta acción fueron:
- Búho Real (Bubo bubo): Una de las rapaces nocturnas más emblemáticas de Europa.
- Aguileña calzada (Hieraaetus pennatus): Ave migratoria de tamaño medio reconocida por su vuelo ágil.
- Milano negro (Milvus migrans): Ave carroñera que desempeña un papel clave en la limpieza del medio natural.
- Halcón peregrino (Falco peregrinus): Considerado el ave más veloz del mundo.
- Ratonero común (Buteo buteo): Rapaz diurna muy extendida en la península ibérica.
Liberación controlada: un proceso fundamental
La liberación de fauna recuperada es un paso crucial que se realiza de forma controlada para asegurar que el animal puede desenvolverse de nuevo en su ecosistema natural. Se elige el área más adecuada para cada especie, se valoran los factores climáticos y ecológicos, y se realiza un monitoreo posterior cuando es necesario.
Concienciar para conservar
Además de su labor técnica, el CERI y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha trabajan activamente en la educación ambiental y la sensibilización ciudadana, recordando la importancia de informar sobre animales heridos y evitar prácticas que pongan en riesgo su supervivencia.
Conclusión
La recuperación y liberación de estas cinco aves rapaces es un ejemplo tangible del compromiso con la biodiversidad y la conservación en Castilla-La Mancha. Es fundamental continuar apoyando estas iniciativas que no solo protegen a especies amenazadas, sino que también garantizan el equilibrio de nuestros ecosistemas.
Para conocer más detalles sobre esta liberación y el trabajo del CERI, puedes visitar la noticia completa en este enlace.